jueves, 13 de septiembre de 2012

El Sabio de los Tres Caminos


Un largo viaje les espera a las personas que desean dirigirse a un pequeño, pero atractivo pueblo apartado de una ciudad, para llegar a él se tiene que pasar por una gran montaña rocosa, la buena noticia es que existe más de una forma que nos lleve hasta él, para ser exactos, son tres caminos para elegir.

Estos tres caminos tienen características particulares, dos de ellos son muy largos y tan angostos que solo una persona a la vez puede avanzar con facilidad, además de ser muy seguros, en cambio el camino restante es más amplio, mucho más corto pero muy inseguro, ya que ciertos criminales roban y asaltan a los viajeros, los golpean sin piedad y los dejan a su suerte.

Un día cualquiera, tres viajeros dispuestos a ir a la ciudad llegaron a la intersección de los caminos, se toparon con la sorpresa de encontrar a un hombre mal herido tendido en el suelo, como es de imaginar, debía ser víctima de los criminales del camino más corto. El primer viajero rápidamente tomó uno de los caminos más seguros y se fue sin decir más, el segundo viajero repitiendo constantemente que le gustaría ayudar pero que tenía mucha prisa, tomó el camino seguro faltante y se fue dejando al tercer viajero solo, que ya había ayudado a levantarse y tenía de un brazo al pobre herido, movió la cabeza con gestos de decepción y sabiendo muy bien lo que podía esperarle, no dudo en ningún momento y se dispuso a seguir por el camino más corto.

Era de noche y el viajero tenía que descansar no solo para tratar de curar las heridas del hombre, sino para intentar recuperar fuerzas e ir a un paso más rápido así no pondría en peligro a ninguno de los dos. Ya había prendido una fogata cuando oyó ruidos cada vez más cercanos entre los arbustos, de repente un fuerte golpe en la nuca lo dejó tumbado en el frío suelo de la montaña, con las fuerzas que reunió para levantarse, solo pudo observar unas cuatro o cinco figuras en la oscuridad, tres de ellas se le acercaban y dos estaban buscando entre sus cosas. No le dieron ni tiempo para defenderse, como sucios cobardes, estos tres hombres lo golpeaban sin descanso en el rostro, abdomen y piernas, su corazón acelerado y retumbando fue lo único que pudo oír el viajero antes de quedar inconsciente.

Con la fuerza de un candente rayo de sol, el viajero despertó, respiraba con dificultad, apenas sentía algo de todo su cuerpo molido, con la nobleza que lo caracterizaba solo logró reunir unas últimas fuerzas para verificar que el hombre herido, esté al menos como la última vez que lo vio. Y así fue, los criminales tuvieron al menos la dignidad de no hacerle más daño a un hombre herido e indefenso, este ya más consciente y lúcido, se puso de pie solo, con algo de dificultad. Ahora él y el viajero se apoyaban el uno al otro y siguieron caminando.

Por mucha suerte, la vida o azares del destino, no era muy distante el camino que les faltaba recorrer, llegaron en un par de horas. Al entrar a la ciudad a un par de cuadras, el viajero se encontró con los otros dos, les pidió dinero prestado para pagar servicios de un médico y posada, pero nuevamente dieron excusas y se alejaron. El pobre viajero ya no tenía fuerzas ni para indignarse de ellos, cayó desmayado en segundos.

Era una cálida y tranquila mañana en el pueblo, el viajero despierta y se sorprende al estar sobre una cama, sale de ella y del cuarto. Al toparse con el dueño de la posada le pregunta por el hombre que estaba con él, el dueño sonriente le dice que también fue atendido, pero que no necesito tanto reposo como él, como no tenían dinero el hombre ofreció pagar los servicios con su trabajo en la posada, el dueño admirado por su historia acepta y les ofrece todo sin pedir nada a cambio. El viajero estuvo inconsciente por toda una semana, durante ella el hombre que tanto ayudó lo cuidó, mientras también trabajaba en la posada como muestra de agradecimiento.

Viajero: Oiga señor…
Dueño de la posada: Dígame.
Viajero: Y ¿a dónde ha ido?
Dueño de la posada: Tranquilo, solo ha ido a por el desayuno.
Viajero: Me alegro, no estaría tranquilo si no le hubiese podido dar las gracias.
Dueño de la posada: (Sonriendo). Qué curioso, su amigo dijo algo parecido.



*Realmente en el mundo solo existen dos tipos de hombres: los buenos y los malos. Una sola acción no define toda una vida, ser prejuicioso es tan malo como actuar de tal forma, pero ver que se comete el mal o injusticia y no hacer nada, también es un acto de maldad, por omisión.

*También hay una gran diferencia, entre los hombres que harían cualquier cosa que se tenga que hacer y los que hacen lo correcto, los primeros harían cualquier cosa mientras seguramente los beneficie, en cambio los segundos, hacen lo correcto porque saben que eso es lo que se tiene que hacer.

*Muchos hacen lo que quieren, pero muy pocos queremos lo que se hace.

*Recordar que las buenas intenciones no bastan, si se quiere hacer algo bueno y correcto, solo se hace, porque de “buenas intenciones” está lleno el infierno.

*Gracias.






Aldo RF

martes, 7 de agosto de 2012

MIRADA


Mirada

Encanto que te abraza
con hechizo deslumbrante,
fuerza que te expulsa
como onda penetrante.

Pura luz divina,
que alimenta ilusiones
y pule mis sonrisas.

Me pierdo en ella,
soy náufrago en sus mares,
tengo alas en su cielo
y luna en sus estrellas.

El color de sus cristales
no le otorga el brillo de su alma,
ni el don de paz inigualable.

Que su luz brille por siempre,
que tiempo no extinga,
que agua no desgaste,
que pena no le quite vida.

Su ternura me desborda,
su pureza me desata
y su belleza me desarma.

Un segundo es suficiente,
en ese mundo de esperanza,
aunque ya no tenga más,
me basta una, una sola… para vivir.





Por las miradas que te pierden entre suspiros.
Aldo RF



martes, 24 de julio de 2012

Amor. ¿Dónde estás que no te veo?


Absoluto. Nada es absoluto, todo es relativo. Mentira. El problema es que muchos no sabíamos que sí las hay, pero todos siempre cerramos los ojos al ver la verdad, es algo así como un reflejo y hábito que tenemos, muy feo por cierto. A veces algo o es blanco o negro sin más, no hay grises, sin embargo la vida es de colores pero sin los grises no lo sería. A veces algo o es frío o es caliente, no existe lo tibio. A veces todo es o un Sí o un No, para nada un quizás. Hay leyes que se aplican a todos no importa que tan individual o singular seas, si el color rojo para unos sería azul, para otros verde y para otros negro, entonces no existe el color rojo en verdad. De la misma forma con el Amor. Probablemente si todos tuviésemos el mismo concepto de Amor y nos dejáramos de ambigüedades tontas, el mundo sería diferente. ¿Quién sabe, eh?


No, no es lo mismo

Me gustaría definir algunos conceptos de forma rápida según mi opinión. Para nada es lo mismo atracción, gusto, enamorarse, querer y amar. Una atracción puede ser solo física o por algún rasgo personal llamativo, pero creo que a nadie puede gustarle o enamorarse de alguien que no conoce. Un gusto es la atracción, mucho más madura que no solo ve la característica que le llamó la atención, sino también va en camino a apreciar lo demás. Enamorarse, atracción constante hacia una persona que te gusta y que has comenzado a querer de manera integral, si es verdadera, como lo dice la palabra va de la mano con el amor. Querer, es uno de los grados del amor, tampoco es que se pueda querer a todos porque sí. Amar, no hay distintas formas de amar, tiene sus grados, pero solo hay una única y sola forma de amar, amando.


No es destino

A veces buscamos y pocas veces encontramos, a veces buscamos y no encontramos, a veces dejamos de buscar y sin pensarlo encontramos; a veces en cambio buscan y nos encuentran, algunas veces no buscan y finalmente igual nos encuentran. No se trata de ir por el mundo buscando pareja, y mucho menos con estándares como ‘ideal’ o ‘perfecta’, las mejores cosas suceden sin ser planeadas y se dan por sí solas, no como un destino, sino como un viaje un camino, en el que dos individuos aprovechan de cada oportunidad juntos cada día, como si fuese el único y último.


Fuera de rutina

He querido redactar esto desde hace más de un año, pero me hubiese quedado corto, si tantos escritores lo han hecho y hacen, y muchos a los que respeto han hablado de esto llamado Amor y de todo el proceso hasta llegar a él, de maneras casi exactas, ¿por qué no?

Veamos no puedo escribir de cómo son los inicios, a veces son tan comunes en muchos, casualidades tal vez, e incluso no existen. Esto es porque lo más importante es la trama, mucho más que el mismo desenlace, así que solo hablaré de ella, ya lo entenderán.

Sonará muy anticuado pero para esta parte no escribiré con la cabeza sino con todo lo demás, creo realmente que muchos se identificarán, otros no:

No recuerdo muy bien cuándo fue la primera vez que la vi, pero todavía me pregunto cómo logra hacer que mi corazón se acelere y desacelere tan rápido, logra convertirme en un rojo tomate y con tan solo verla pasar o cómo logra enredar mi lengua y hacer que diga tales incoherencias hasta con mis amigos, no imagino que ocurriría si me le acerco, ¿enmudeceré, tartamudearé, explotaré o moriré en el intento? ¡Qué va! Es ahora o nunca.

Bueno estoy feliz ahora ya sé su nombre al menos, y ella el mío. Han pasado varias semanas y ya nos conocemos más el uno al otro. Ella no sabe pero he encontrado las formas o mejor dicho excusas para estar aunque sea unos momentos más a su lado. Me atrae tanto, mentira, me atrae más que la primera vez que la vi, no puede ser posible que ya esté más confiado pero siga poniéndome igual de nervioso, espero no se haya dado cuenta.

No sé nada sobre eso que dicen de las mariposas en la panza, ¿será cierto? Aún así las cosas que sentía por ella cuando la veía pasar, se han intensificado por cien, no muy poco, por mil o más. Es que ahora me gusta… y mucho. Lo sé, sé que me gusta, yo lo sé, además de ser muy guapa y eso me atrajo de ella, sabía siempre que conocerla valdría mucho la pena, y así fue, es una persona genial, maravillosa y eso que me falta conocerla más.

¿Esto es a lo que llaman enamorarse? Si no lo es, entonces que podría ser. Cuando su humanidad sale a la luz con más fuerza, yo solo la abrazo para hacerle saber que estoy ahí. Es una persona imperfecta, nadie es perfecto, yo no lo soy. Sin embargo ambos somos perfectamente imperfectos. Me gustan y encantan sus virtudes, pero he llegado a amar sus defectos. ¿Acaso eso no es amar? ¿Querer con mucha intensidad a toda la persona? Si esto no es amor, ya no quiero decirle a mi corazón que se equivocó, de nuevo.



Variantes de trama

1) Si el sentimiento es mutuo, y dos personas que ya se tomaron la molestia antes de conocerse a sí mismos, en su soledad. Es totalmente seguro que se tomarán la molestia de conocer a otra persona, y tomarse todo el tiempo que sea necesario. Siendo así, si se atraen, luego se podrán gustar, y hasta enamorarse y quizás algún día, puedan amarse.

2) Si la situación no pasa de la mera atracción por ambos lados, y llegaron a conocerse lo suficiente, no se gustaron pero se tienen el afecto y cariño como para comprender que valió la pena conocerse el uno al otro, seguro serán buenos amigos. Nadie puede obligar a otra persona a gustarle o enamorarse.

3) Si a una persona le atrae alguien, luego le gusta, pero con la otra no pasa lo mismo. Ahí quedará todo, el enamorarse es un juego de dos, es un dar sin recibir, una paradoja, si dos personas saben esto, y dan sin recibir, estarán recibiendo lo más preciado del otro. Es por eso que este tipo de amor existe, uno de los más dolorosos, el amor no correspondido. Este te puede llevar tanto a la desolación, pero lo correcto si amas de verdad es llevarte al desear el bien del ser amado, sí lo sé, es más fácil decirlo que hacerlo, exactamente pocos pueden.

4) Si dos personas solo se atraen, no han llegado ni a conocerse a sí mismos, fingen gustarse, fingen amarse, lo que no podrán es fingir dañarse, porque eso es lo que lograrán. Es lamentable ver que esto está ocurriendo actualmente. Esta es la peor de las tramas, inexistente, con un horrible desenlace y con un vacío inicio.


Finales: ¿Dónde están los cuentos de hadas?

Tantas razones por las que una relación termina, yo las clasificaría como correctas o injustas. Las primeras son todas aquellas en las que si una relación no va para más, o si el mal que se hacen o pueden hacer no compensa lo bueno de lo suyo, o cuando una persona que se estima y aprecia toma una decisión difícil, que de hecho le dolerá, pero también de hecho es lo mejor para ella.

A veces un gusto se puede estancar y jamás avanzará a amor, si pasa en ambas partes, tomaron la decisión correcta si terminan, si no es así y una todavía siente, la otra tendrá que poner un alto a todo, quizás al inicio la que aún quiere no lo entenderá, pero lo hace por su bien. Otras veces, dos personas tienen las suficientes cosas en común para quererse y pasar buenos momentos juntos, pero sus personalidades y caracteres muy opuestos terminan haciendo daño al otro, si el bien que se hacen juntos no hace que lo malo se olvide, entonces no les irá bien. Casos especiales en las que una persona se entrega y enamora en serio, pero la otra le falla sea cual sea la manera, una traición no se perdona, no importa que prometan cambiar, el cambio será solo temporal, nadie cambia por otra persona, a menos que por sí sola haya decidido cambiar pero para ser mejor, además si lo hizo una vez, quizás lo haga de nuevo, nadie obligó a esa persona a fallar, aunque duela mucho, en esos casos una soledad es mucho mejor.

Las razones a las que yo llamo “injustas” son así de simple aquellas en las que la decisión de continuar o terminar no dependía ni de uno ni de ambos en sí, sino de la vida misma, ya que hay factores internos que no pueden ser cuestionados, lo único que queda es aceptarlo y desear el bien del otro. Que irónico que quienes quieren estar juntos no puedan, y algunas personas tienen a su lado siempre a alguien pero no saben valorarla, y no importa que les hagan, siempre están a su lado.


Deberían dejar de contar esos cuentos en los que el predecible final es un “y vivieron felices para siempre”. No existe tal felicidad, bueno no aquí en la tierra, en la vida real, los que queremos algo de verdad luchamos por conseguirlo y si se trata de amor, también luchamos por conseguirlo y conservarlo.


Promesas peligrosas

Al parecer hoy en día a las personas les gusta prometer e intentar regalar cosas que ni ellas mismas tienen. No entiendo como nosotros de naturaleza efímera, con una corta vida pasajera, ¿cómo podemos prometer eternidad así? Y miren ahí a la gente jurándose amor eterno, “para siempre y por siempre”. Ni siquiera parejas que realmente se aman y deciden pasar la vida juntas son tan insensatas para prometerse eso, ¿acaso no han ido a un matrimonio? ¿Escucharon o no la parte que dice: ‘en la riqueza y en la pobreza, en la salud y la enfermedad, hasta que la muerte nos separe’? La muerte es lo único que puede separar un amor muy sincero y maduro, incluso a veces no puede, cuando el amante que aún vive sigue honrando la memoria del otro. Luego por eso, en la ruptura no logran tolerar su tan violenta soledad.

Al parecer solo los patos se pueden prometer eternidad jajaja xD

Tampoco es hablar de la forma más elaborada solo para que suene bonito, la verdad y total verdad es que las cosas más sinceras y honestas, las que se dicen con alma y corazón, son la que la mayor parte del tiempo suenan muy anticuadas y hasta cursis. Porque no pasaron revisión de la razón.


Lo más correcto y sincero sería prometer o jurarse una entrega total día a día, pero el que lo hace ni siquiera tiene que prometerlo y menos jurarlo, simplemente lo demostrará. Querer y amar en el hoy, como si fuese el último.


Duelo obligatorio

Según la psicología y algunas otras ciencias, explican las fases del duelo, en situaciones como la muerte, la ruptura, las noticias de enfermedad terminal, etc. Personalmente describiré la de una ruptura, todos han pasado por esto. Son 5 estas fases:

Sorpresa. Oír y escuchar las palabras que jamás esperaste venir, la peor sorpresa que alguien puede darte. Entrar en profundo estado de shock y ni siquiera tener palabras o emociones inmediatas para lidiar con esto. Solo imaginas un infierno.

Negación. Llegar a pensar que despertaste del lado izquierdo de tu cama, que todo, absolutamente todo es una maldita pesadilla, cierras tus ojos con fuerza, no pasa nada, no despiertas, no puedes despertar. Si el primer día pareció horrible, y una falsa esperanza que tu alma te ha dado como defensa para sobrevivir te dura solo un segundo, porque la pesadilla vuelve y más fuerte que nunca a golpearte todo.

Ira o culpa. Sabiendo con mucha seguridad que la culpa no fue tuya, y peor aún sabiendo que la culpa no es de nadie, te preguntas como loco que fue lo que ha ido mal, al no hallar respuesta puedes encontrarte con una ira ciega o una frustración que no se consuela. Culpas entonces a la vida, le preguntas a Dios el porqué de todo entonces. Sabes que el cielo no te va a responder.

Depresión. Todo lo que hacías y te gustaba, no logra llenar ni la más mínima parte de ti. El tiempo se hace tan extenso, la soledad es cada vez más dura, duele al respirar, duele al recordar, duele al hablar. Todo duele y nada cura. No hay esperanza para ti, la fe ya no basta y tus amigos más cercanos, aunque tenerlos cerca, reconforta, pero nadie te salvará, hasta que decidas salir del hoyo dónde estás.

Aceptación. Quizás aceptar que puedes superar, o al menos sobrellevar lo que te ha pasado es el primer paso. Pasas tiempo con tu familia y amigos, te reconcilias con tu soledad, de nuevo. Y sigues adelante, al principio tal vez con una sonrisa que esconde todo, pero luego se hará tan natural que volverá a irradiar la misma aura que tanto te caracterizaba. A quién no le habrá pasado esto, pero debemos entender que ahora lo más importante es nuestra familia, amigos y la vocación, es decir, vivir haciendo lo que amas. Todo tiene su momento, y si en el camino te dan la oportunidad de querer y amar, lo sabrás reconocer.

*Olvidar, solo es justo cuando el recordar a esa persona te hace mucho daño y no te trae para nada buenos recuerdos. Ya que olvidar a alguien que te hizo tanto bien y mejor persona, no es justo, al menos recordarla con cariño y afecto, y si todo fue verdadero, siempre querrás su bien y felicidad, seguirá siendo tu mejor amiga.


Rompecabezas

Lo más seguro es que después de haberte alejado de alguien a quien querías, y de quien te comenzabas a enamorar, te sientas vacío y hasta partido en pedazos. Dicen que lo de decir que una persona está en tu corazón, es solo una frase bonita, ya que las emociones y sentimientos se encuentran en el sistema nervioso, ¿pero para qué matar la ilusión? Algunas cosas deben mantenerse así. Además ¿por qué entonces cuando algo te duele, te oprime tanto el pecho, muy cerca al corazón? Algo quiere decir.

Hay distintas formas de partir el alma y el corazón en pedacitos, se hace con ayuda de los sentimientos y las emociones, la peor de todas es dividirla con los negativos como el odio, rencor, resentimiento o venganza; cada pieza se queda con la persona a la quien dirigiste, la oscuridad que cada persona tiene se incrementa y oculta la luz totalmente, quien hace esto jamás obtiene la felicidad.

Al contrario si partes tu alma y corazón por amor, nunca será un desperdicio haberlo hecho, no hay arrepentimientos, esa parte tuya entregada tan noblemente, se quedará con la persona a quien tanto amaste, y como el amor solo crece, tu alma y corazón, se sanarán y completarán como un rompecabezas, y algún día estará listo para ser armado y desarmado de nuevo, por alguien que cambie tu mundo, algún día serás capaz de amar de nuevo. Alguien que sabe cómo hacerlo, no puede negarse ese privilegio.


Es por esto que la frase “un clavo saca otro clavo” es tan falsa, se necesita esperar un tiempo de duelo para sobrellevar una pérdida, el tiempo suficiente como para seguir y un día entregarse por completo a alguien de nuevo, y no el excesivo como para vivir amarrado en el pasado alimentando un amor solo, que únicamente llevará a la desolación.


Grados y escalones

Según un libro muy interesante de ética que he leído este semestre por capítulos, me encontré con un capítulo que me agradó mucho. Explica los diferentes grados de amor que la persona es apta de desarrollar y sentir. No recuerdo todos ahora mismo pero sí los últimos dos, el amor de la amistad y el amor en el grado más puro. Solo quiero decir que para llegar a este último, la persona debe ser capaz de liberarse por completo de su egoísmo, liberarse de su propio deseo de conseguir placer y bienestar propio, para obtener el de los demás. Pocos saben encontrar la propia felicidad, ayudando a obtener la del ser querido o amado.


Etiquetas, nada más

El mundo está lleno de juicios apresurados, falsas impresiones, tontas especulaciones y egoístas opiniones de los otros, además se llaman entre sí por apodos basados en alguna característica irrelevante u ofensiva por ser diferentes, al fin y al cabo son etiquetas.

Cuando una persona se vuelve tan importante para ti, la palabra “enamorada”, “novia” o como le llamen en cada país se vuelve una simple etiqueta. Al conocer a una persona tanto y quererla, ella se vuelve tu mejor amiga, tu confidente, por sobretodo se convierte en tu Compañera, antes cuando estabas solo y decías: “Yo contra el mundo”. Al encontrarla, es con quien puedes decir: “Ella y yo, contra el mundo”.



Soledad: ¿Dulce o amarga?

No me cansaré de decir que la mejor amiga para aprender a conocerse, ayudarse, curarse o superarse es la soledad, no la tomen como enemiga. Algunos se desesperan cuando tienen mucho tiempo a solas, no saben cómo utilizarlo, así que apagan la voz de su interior con vicios o con relaciones vacías que ellos parecen disfrutar. Al final no saben que pueden encontrarse con una soledad más dura y fría de la estaban huyendo todo el tiempo, todo por no saber apreciar en su momento lo que debieron.


Mientras que los que hacen uso maduro de su tiempo y hacemos de la soledad nuestra propia compañera para ser la mejor versión de nosotros mismos, incluso estando muy a gusto con ella, habrá un tiempo en el que cuestionas las razones de la vida para estar así, y tu voluntad vuelve a ser puesta a prueba de nuevo, la soledad te golpea recordándote irónicamente que tu única compañera solo es ella, y así tengas como siempre a tu familia y amigos, este tipo de soledad es algo más personal, te preguntas cuánto más vas a durar así.

Es muy doloroso volver a decir: “Yo solo contra el mundo”.


La burla contemporánea

Personas diciéndose “Te amo” luego de estar una semana, personas jurándose “Amor eterno” en su primer mes de aniversario, adolescentes “sufriendo” por amor mientras que en otra dimensión (otro lado del mundo) las personas sufren con razón (por así decirlo, porque nadie merece sufrir, para eso no vivimos), personas “comprometiéndose” y “casándose” por las redes sociales, no tengo nada contra los que lo hacen, pero cada cosa tiene su momento, y algunas cosas solo pasan, cuando el amor madura y es mutuamente alimentado y correspondido.

Lo más irónico es que la mayoría de esas relaciones no duran tanto como se imaginaban, así es la vida y el amor supongo. Repito, ¿por qué preocuparse en el futuro? Si van a quererse o amarse, entreguen todo de sí a diario, y puede que la vida les dé muchos de esos días.


Las únicas excepciones

No sé si se vuelven resentidos, rencorosos o solo tienen dolor todavía. No es bueno generalizar o sacar conclusiones sobre las personas sin conocerlas, cierto que algunas son fácilmente predecibles, pero otras no, aún así todas las personas son complicadas y nunca terminarás de conocer a solo una.

Aprovecho de nuevo en hablar de las redes sociales, algunas chicas defendiendo su género y exponiendo a todos los hombres como absoluto desperdicio, pues como ponen “todos son iguales”, tendrán sus razones, pero hombres y mujeres hay de todo tipo, se me vino a la mente lo que nos dijo una profesora este semestre: “Chicas, hombres buenos los hay, pero se buscan con lupa. Para los chicos, mujeres buenas las hay, pero también se buscan con lupa. Chicas, ¿dicen que no hay hombres buenos? ¿Y las que tienen buenos ejemplos de padre, acaso ellos no lo son? Chicos, ¿no hay mujeres buenas? ¿Qué dicen de sus madres, acaso no son buenas mujeres? Hay que buscar, pero ya dije, con lupa”. Además sé que algunas chicas y también nosotros los chicos tenemos, ellas a un amigo que respetan y conocen bien, así como nosotros a alguna amiga que conocemos y respetamos, que sabemos que valen la pena, el que haya una historia ahí o no, es cuestión de gustos y colores. Lo que trato de decir es que sabiendo esto, ¿cómo pueden generalizar ambos géneros? No se puede.


Sé que por ambos lados, hay muchas razones para haber perdido la confianza, sobre todo las chicas, ya lo dije para eso hay que tomarse la molestia de conocer bien a la persona ¿no? Y sí, hay marcadas diferencias entre ambos géneros, recuerdo una charla de sexualidad cuando estaba en quinto de secundaria: “Las mujeres son teteras y los hombres microondas”, porque las mujeres se demoran para ‘calentarse’, en cambio los hombres se ‘calientan’ al toque. Conociendo la fisiología y naturaleza, son cobardes los que ponen esto como excusa, por algo somos ‘animales racionales’, sino tuviésemos voluntad y razón, para elegir la virtud por sobre el vicio, el pensar por sobre el instinto, entonces no seríamos más de los que afirmamos ser superiores, los animales.

Realmente creo que aunque todo parezca sin esperanza, hay personas que valen la pena, hay algunas excepciones, esperemos que muchas, de ahora en adelante.


Palabras poderosas

Tengo un concepto personal de “Amor”, que he ido modificando al pasar los años de mi corta vida, uno que gané con experiencia y con literatura de calidad:

Amor es cuando te llega a gustar tanto una persona, que comienzas a enamorarte de ella, quieres sus virtudes y cosas buenas, pero sobre todo aprendes a amar sus defectos e imperfecciones, con esa persona eres tú mismo todo el tiempo, le cuentas todo, piensas en voz alta, no te guardas nada, quieres pasar todo el tiempo con ella, pero sabes que el que sea gran parte de tu vida, no quiere decir que es toda tu vida, quieres su independencia y amas su libertad, le tienes profunda confianza y jamás dudarías de ella, porque ya la conoces muy bien, puedes saber con una mirada si está bien o no, ya no hace falta preguntar más, con ella tanto las sonrisas como los silencios significan algo, compartes la soledad en su compañerismo, la apoyas y le deseas todo el bien del mundo, comprendes sus buenos y malos momentos pero entiendes sus momentos de dolor, juntos crecen y aprenden, no son opuestos que se complementan, sino que ambos sacan el potencial del otro, amas integralmente todo lo que es ahora y también lo que será y puede ser.

Dios Jano, dios de dos caras, representa el inicio y el final, la luz y oscuridad, se ama el bien y el mal de la persona.

Si van a decir un “Te amo”, antes deben de aprender a decir un sincero “Te quiero”, para mí no son simples palabras, ambas son dos frases que pueden cambiar vidas, cambiar incluso el mundo. ¿Quién sabe? Son palabras de gran impacto, que a cualquier persona le gustaría escuchar algún día, por eso no se dicen a la ligera.


Una persona así, es lo que cualquier otra persona en este mundo merece y merecerá. Es lo que están buscando, pero algunos aún no lo saben, antes algunos estarán buscando lo que no necesitan ni merecen, espero que se den cuenta a tiempo. Algunos tenemos que marcar la diferencia, siempre, así el mundo haya perdido la esperanza y esté envuelto en un caos.


Una razón

Al final de todo, si te encuentras sin razones para continuar, y las que tenías o las que te quedan ya no son suficientemente fuertes, recuerda que no eres el único o única así, no estás solo o sola, nunca lo estarás. Deja ese profundo sueño de realidad que te ha derribado, y abre los ojos para volver a soñar despierto, busca razones, aunque sea solo una, una muy fuerte basta, cuando esa razón es una persona o personas amadas, será mucho más fácil, las energía para seguir adelante ya no se agotarán. No importa cuántas heridas de vida o de amor tengas, no dejes que eso te cambie, conserva tu esencia siempre, es tu legado.



Aldo Ríos Flores

viernes, 6 de julio de 2012

El Único Rival


De niños nos enseñan que la vida es una carrera y lucha constante contra todo y todos, contra el tiempo, contra la enfermedad, contra la muerte; es decir nos enseñan a temerle a lo inevitable, a lo natural, al contrario deben enseñarnos a luchar contra el pesimismo, contra la injusticia, contra el odio, todo lo que se vence con una fuerte voluntad y un gran espíritu para seguir adelante.

Incluso algunos padres inculcan una pronunciada competitividad en sus hijos, diciéndoles que tienen que ‘ser mejor que todos’, no critico ni digo que esto esté mal, pues todos los padres tienen muchas expectativas, pero los niños interpretan todo tal como se les dice y eso en mi experiencia puede volver a algunos un tanto egoístas, arrogantes e incluso soberbios.

Comprendí que a la única persona a la que tengo que ganarle es al ‘Yo de ayer’, ese ‘Yo’ que quizás cometió algún error o equivocación, ese ‘Yo’ que tuvo éxito u obtuvo un mérito, sacarle todo el provecho a ese ‘Yo’ para aprender de lo vivido, mejorar lo ya logrado y pulir el ‘Yo’ de hoy en todo lo posible, para sacar todo su potencial. Lo importante es ser cada día un poco mejor que ayer, ya que  este día nunca regresa, el mañana, siempre lo digo, es una ilusión, el único día que existe en realidad es el “Hoy”.

Personalmente a mí me decían y dicen desde mi primer día de jardín: “Hijo, sé el mejor”, y yo me lo he tomado muy en serio, pero ya poco a poco me di cuenta, que no solo se referían al aspecto académico, sino que ellos querían y quieren que sea el mejor integralmente, que tenga éxito en cada aspecto o dimensión de mi persona.

Esta continua carrera contra mí mismo, es fascinante, ahora que estoy concentrado en solo ganarme a mí, conozco mis propios límites y cuando llego a ellos, encuentro la manera de superarlos de nuevo, me exijo al máximo para que mis virtudes y debilidades afloren, para engrandecer las primeras y fortalecer las segundas. Además confieso que siempre entre dos opciones elegiré la más difícil, lo fácil es muy aburrido, infravaloramos lo que obtenemos sin esfuerzo, cuando consigues algo que te costó bastante, sabes que lo que pasaste para conseguirlo, valió mucha la pena, y por eso las cosas conseguidas así, se valoran más. Y siempre recordar que las cosas más importantes de la vida, no son cosas, sino personas.

Antes me molestaba que me subestimen, pero ahora sé muy bien, que me encanta que lo hagan, haciendo eso me dan la gran oportunidad de sorprenderlos, de demostrarles que si me dicen que “No puedo hacer algo”, lo podré hacer y mucho mejor de lo que imaginan, me podrán decir que es lo que puedo hacer en diferentes circunstancias porque estamos sometidos a reglas, pero jamás piensen que pueden decirme que ‘No puedo hacer’. Nunca le digo ‘No’ a un desafío o reto, mientras este no atente a mi dignidad o mis principios o al de otros. No le temo a nada. Es genial esa sensación de obtener un logro, yendo contra toda probabilidad de éxito, causas un milagro, uno personal pero lo causas, nadie se conoce mejor que cada uno así que no dejen que los demás intenten adivinar quiénes son.

Quizás muchas de estas cosas no suenen muy atractivas, respecto a lo que muchos piensan de lo que es “vivir”, pero al menos vivo la libertad en uno de sus estados más puros: Soy el dueño de mi propio destino, y soy quien quiero ser, Yo mismo.






Aldo Ríos Flores

lunes, 25 de junio de 2012

Equivocado Corazón


A continuación una frase de las más gastadas, y para algunos de las más anticuadas que hay: “Escucha a tu corazón, pues él no se equivoca”.

¿Saben qué? El corazón para mí es el que más se equivoca, se equivocó ayer, se equivoca hoy y se equivocará mañana, se equivoca día, tarde y noche, y cuando no se equivoca, está pensando como equivocarse nuevamente.

No olvida el dolor pero aprende del amor, no olvida el sufrimiento pero otorga el perdón, los más fuertes y valientes son los más frágiles, los más golpeados y heridos son los más tercos y obstinados, no se rinden y siempre se levantan, saben que pasarán por todo de nuevo, cuando valga la pena, por los motivos correctos.

Y cuando no se equivocan, cuando consiguen finalmente un logro, se les queda grabado eternamente, plasmado con tinta de sangre como milagro ardiente.

Pero… ese equivocado corazón, es el más puro de todos los consejeros, cuando hagan lo que él dice, siéntanse orgullosos, pues aún con todos sus errores, es el más leal y noble compañero, si lo siguen tendrán el actuar más honesto y transparente.


Aldo RF

domingo, 10 de junio de 2012

Reborn

Sufrir lentamente no es vivir,
vivir para sufrir es morir
y morir no solo es dejar de existir.


¿Morir? Hay muchas formas de morir,
se muere aferrándose al pasado,
también rechazando el presente,
negándose los días de felicidad
y hasta aquellos de soledad.


¿Vivir? Se vive una sola vez,
demasiado corta para hacer de todo,
vida, muy finita para prometer eternidad,
tan hermosa como para no vivirse
y tan nuestra como tan ajena,
vida, sin compañía no es nada.


Sufrir con vida es vivir,
vivir para servir no es morir
y morir no solo es dejar de existir.


Si estás muerto en vida, muere,
si una parte de ti no funciona, mátala,
si quieres vivir realmente, renacerás,
si quieres renacer, entonces vivirás.


Prometo que si no vivo, moriré,
si no quiero morir, tendrán que matarme,
no teman es por mi bien, prometo regresar,
siempre encuentro la forma de hacerlo.


Morir, no es tan malo si vas a volver,
volver, siendo el mismo siempre,
siempre, ser cada día un poco mejor
y mejor morir, si vas a vivir.




Tuve que morir, para finalmente poder renacer.


Aldo Ríos Flores

jueves, 7 de junio de 2012

Apuesta de niños


En Italia, cerca de una hermosa iglesia llamada Monte de los Capuchinos vivían un par de niños de 7 años, ambos muy grandes amigos desde pequeños, Caterina y Giovanni, ya que sus padres que se dedicaban al ganado también lo fueron. Esas tierras les pertenecían a ambas familias y a una más, de la cual solo quedaba un único representante, Rocco, un solitario joven de 20 años, que había perdido a sus padres y a su amada novia en un trágico incendio años atrás.

Caterina y Giovanni aunque eran muy buenos amigos, solo jugaban juntos por las tardes, y eso debido a que cada uno tenía una singular costumbre en un momento del día, Caterina durante las mañanas y Giovanni por las noches. Comenzaba ya el invierno en Italia, y Giovanni planeando muchas formas nuevas de juegos y cosas por hacer, entabla una seria conversación con su amiga.

-Oye Caterina, ¿qué tanto haces por las mañanas, que cuando voy a tu casa preguntando por ti, me dicen que has salido? Además me dicen que no regresas hasta la tarde.

-Muy cierto, pero dime también entonces, ¿qué tanto haces en las noches, que cuando voy a buscarte me dicen que no regresas hasta después de las 10?

-¡Está bien, está bien! Te lo contaré pero si tú me dices antes, además yo te lo he preguntado primero.

-¡Eso no se vale! Bueno respetaré el orden por esta vez, ¡tramposo!

-Adelante te escucho (riendo).

-Voy a la Plaza San Marcos, subo a la cima de la Catedral y me acuesto en el cálido suelo de mármol mirando al cielo, mi cielo favorito, el de las tibias mañanas. Si te preguntas porqué hago eso, la razón es simple, me gusta ver el infinito horizonte y darle forma a las nubes tan blancas como la nieve.

-Espera, ¿en serio?

-Sí, ¿qué acaso tiene algo de malo?!

-No no, a eso no me refiero. ¿En serio vas a la Plaza San Marcos?

-Sí, ¿por qué?

-Porque cuando voy y pregunto por ti, a veces me paso toda la mañana buscándote por toda la ciudad, pero no voy a la Plaza porque pensé que no te gustaba, ya que cuando te pregunté una vez si me querías acompañar una noche allá, me dijiste que no sin dar razón.

-No me digas que tú vas a la Plaza por las noches…

-Bueno, entonces no te digo.

-¡Es un decir! No seas tramposo de nuevo, ¡es tu turno de contarme!

-Voy por las noches a la Plaza, también subo hasta la cima de la Catedral, me recuesto sobre el suelo, mucho más frío pero refrescante, y me pongo a ver el oscuro firmamento lleno de millares de estrellas, esperando para ser contadas y constelaciones nuevas por descubrirse, algunos días se aparece la belleza blanca de este cielo, esa que llamamos Luna.

-¿Cuentas las estrellas y descubres nuevas constelaciones? Tengo curiosidad dime cómo lo logras.

-Sé que suena algo tonto, porque no se puede terminar de contarlas. Y cómo no sé dar forma a las constelaciones existentes, yo creo las mías propias.

-Muy interesante, pero me quedo con mi cielo mañanero.

-Solo lo dices porque no sabes apreciar al cielo nocturno, ¡es mucho mejor!

-No quiero discutir contigo, mejor ¡apostemos!

-Trato hecho. ¿Qué apuestas?

-El otro tendrá que ver el cielo que no sabe apreciar todavía, por una semana, y luego de eso, con toda sinceridad tendrá que decir si le gustó o no. ¿Aceptas Giovanni?

-Está bien, pero el otro tendrá que acompañar al otro siempre. Así por fin podremos pasar todos los días juntos como siempre ha sido.

-No podría estar más de acuerdo con ello.

*
Y así fue como una inocente apuesta de niños, consolidó y fortaleció una amistad que duraría muchísimos años más, quizás hasta el cruel finito final del ciclo de la vida.

Pasó una semana completa, y ambos niños acordaron verse en la Plaza San Marcos una tarde. Ambos charlaron honestamente sobre la semana vivida, y aceptaron también que lo que vieron y sintieron a cada momento fue inimaginable, indiscutiblemente hermoso. Sin embargo, como nunca, y la verdad que nunca habían peleado, pero lo comenzaron a hacer, discutieron.

-Acéptalo Caterina, te gusta más el cielo en la noche, te enamoraste de la luna, ¡tú me lo dijiste!

-Pero acepta tú entonces, que te encanta más darle forma a las nubes, ¡qué a las mismas estrellas!

-¡Y tú! Me dijiste que sueñas con algún día llegar hasta la luna.

-¡Pero tú! Me dijiste que sueñas con volar sobre alguna nube.

-No tiene caso discutir contigo. ¡Eres terca!

-¡Y tú eres un obstinado! ¡Un mentiroso!

-¡Niños ya! ¡Dejen de pelear, son amigos, por favor!

-¿Rocco? (ambos).

-Sí soy yo, siempre he estado aquí, siempre los observo y cuido, y es la primera vez que los escucho hablar tan fuerte, y de esta forma.

-Discúlpame Rocco, pero Caterina es una terca.

-Discúlpame a mí también Rocco, pero Giovanni ¡es un tarado!

-Ya tranquilos niños. Déjenme preguntarles algo, una sola cosa y respondan con toda honestidad. ¿Qué es lo que más les ha gustado de esta semana? Respondan a la vez, sin pensar mucho, que hable el corazón.

Al unísono respondieron cada uno: “Pasar tiempo con ella” – “Pasar tiempo con él”. Ambos se miraron sorprendidos y algo tímidos.

-Lo ven, eso es lo que siempre quisieron cuando hicieron esta apuesta, pasar tiempo el uno con el otro, porque si uno faltase ya nada sería lo mismo, ¿cierto?

-Es cierto, cuando iba sola por las mañanas, todas las veces deseaba que él me estuviese acompañando, pero nunca se lo pregunté.

-Y yo, todas las veces que veía la luna, cada noche la veía a ella, la imaginaba a mi lado, haciéndome reír como siempre, conversando de todo y de nada a la vez.

-Lo ven niños, son muy buenos amigos, lo han sido y lo serán, jamás lo olviden. Acerca de sus sueños…recuerden que “los sueños que no aterrizan, no nos sirven” y punto.

-Te refieres ¿a qué soñar muy alto es malo? (ambos).

-No me refiero a eso (sonriendo). Les explicaré: Tener un sueño y vivir creyendo que es posible, pero no poner el alma para hacerlo realidad, eso es un sueño que no aterriza. Entonces siempre, siempre recuerden que los encargados de hacer realidad algo, cuando realmente se quiere y sabemos que vale la pena, somos nosotros. Cada uno es el piloto encargado de hacer aterrizar hasta el más anhelado e imposible sueño.

*
Luego de aquel día Caterina y Giovanni, disfrutaban con más intensidad los días de amistad que pasaban juntos, se apoyaban, se estimaban, se tenían afecto y mucho cariño, se entendían y comprendían, se peleaban pero se amistaban más rápido, y sobre todo se querían en demasía.

-Giovanni, Rocco me cae muy muy bien, debemos invitarlo a partir de mañana a sentarse con nosotros.

-Tiene toda la razón, su compañía y sabias palabras, son realmente reconfortantes.


Aldo Ríos Flores